Durante la década del 80 en Argentina se comienza a tomar real conciencia de la dimensión que tenía el fenómeno del tráfico ilícito y abuso de drogas; hasta ese momento se pensaba que era un problema de otros países, no obstante en las filas de la Policía de la Provincia, existía una preocupación por el tema y se encaraba la lucha a través de Secciones específicas en las ciudades más importantes de la Provincia como Santa Fe y Rosario, que actuaban en forma voluntariosa, pero sin ningún tipo de coordinación entre ellas ni conexión entre los funcionarios dedicados a este tipo de delito y por supuesto tampoco había ninguna relación con Fuerzas Policiales de otras Provincias o Fuerzas de Seguridad nacionales; se puede decir que a pesar de no ser totalmente satisfactoria la forma de combatir este ilícito, para la época había sido un logro, que de alguna manera trató de paliar el avance arrollador del flagelo.
La sociedad exigía de sus autoridades tener una visión más global de la problemática, emprendiendo profundos estudios sobre una mejor manera de encarar la lucha, logrando que el gobierno se preocupara por la situación e iniciara un estudio y consultas a Fuerzas de Seguridad nacionales. Como resultado de ello se crea una Dependencia especializada, que se denomina BRIGADA ESPECIAL ANTINARCOTICO (B.E.A.), conformada por un reducido, pero selecto número de policías, escogidos por sus antecedentes funcionales y personales, y por aquellos que con antelación habían avizorado el problema.
Los resultados fueron claros y contundentes, en forma rápida y por primera vez se obtuvo un estado de situación de la provincia, en lo que hace a tráfico ilícito y abuso de estupefacientes; de la misma forma se logró capacitar a un grupo de funcionarios con características de alta operatividad que podía trasladarse y actuar en cualquier punto geográfico de la provincia en cuestión de minutos. Es indudable que el emprendimiento del Gobierno de la Provincia había rendido sus frutos, dado que se logro progresar ostensiblemente en la lucha contra este delito.

No obstante esta circunstancias, había plena conciencia que para encarar eficazmente la represión del narcotráfico y el abuso de drogas, se tenía que estructurar una nueva dependencia con mayores pretensiones, mejor logística y apoyada por profesionales especialistas en la materia. Es por eso que se crea en fecha 02 DE AGOSTO DE 1989 la DIRECCION ESPECIAL DE DROGAS PELIGROSAS de la Policía, con una estructura superior, dado que se dota a la misma de una central y personal permanente en los diecinueve departamentos que conforman la provincia, dándole una agilidad informativa, operativa y la coordinación que la represión del delito requiere, contando además la mencionada dependencia con un gabinete técnico compuesto por profesionales de distintas disciplinas, para realizar estudios sobre las causas sociales de adicción y aceptación de las drogas; y una División Prevención con la participación de estos idóneos, para recorrer la provincia e informar a la población sobre la temática y otras dependencias necesarias para poder desarrollar las tareas específicas.
Los resultados fueron gratificantes, ya que se lograron concretar duros golpes a bandas dedicadas al tráfico de estupefacientes y no sólo en las ciudades más importantes, como en Santa Fe y Rosario, sino que se realizaron procedimientos en sitios donde nunca antes se lo habían hecho como en el caso de Gálvez, San Justo, San Carlos, San Javier, Sunchales, Rafaela, Las Parejas por nombrar algunas localidades; es de mencionar que en Rosario se desbarataron grandes organizaciones obteniéndose el secuestro de importantes cantidades de drogas, como así de otros medios utilizados para consumar los delitos y/o también productos del lavado del dinero.

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Los resultados satisfactorios no solo fueron en el plano operativo, sino que se obtuvieron otros logros que no son tan llamativos, pero tienen igual importancia, por ejemplo la creación de un centro propio de adiestramiento de canes detectores de drogas, creación de un laboratorio modelo, con la más alta tecnología para realizar los análisis de las drogas secuestradas; la creación de una sala informática, donde se procesan todas las informaciónes que se obtienen a niveles provinciales, nacionales e internacionales.
En relación al área de prevención, el personal especializado recorrió escuelas, colegios, clubes, entidades intermedias y asociaciones vecinales, disertando sobre la temática de la Drogadependencia, habiendo realizado charlas - debates, jornadas, entrevistas en medios periodísticos, consultas del público-, en casi la totalidad de ciudades y/o pueblos de la provincia, con la asistencia de alumnos de niveles primarios, secundarios, terciarios, docentes y adultos en general. Como así también el personal especializado realizó Jornadas de Capacitación Docente, con la asistencia de maestros y profesores entregándose materiales informativos sobre drogadicción. Dichas Jornadas obedecen a un convenio oportunamente suscripto entre el Ministerio de Educación y la Dirección General de Drogas Peligrosas a los fines de dar cumplimiento al artículo 42 de la Ley 23737.
Con respecto a la capacitación del personal se formó a funcionarios en cursos internacionales en Colombia, Estados Unidos de América, Alemania, España e Italia. En el orden nacional se capacitaron oficiales jefes en el Master en Estupefacientes, que se desarrolla en la Universidad Católica de Salta, Subsede Gendarmería Nacional, habiéndose graduados los funcionarios en cuestión y con estos conocimientos recogidos, poder volcarlos en cursos instrumentados a camaradas de nuestra propia institución y a la población en general.

Al llegar el año mil novecientos noventa y tres la Dirección de Drogas, ante una convocatoria de la Justicia Federal con nuestros profesionales, organizan un Centro de Reeducación de Drogadependientes, también destinado a procesados penales por la Ley de Estupefacientes, denominado " Un Puente de Amor".

En el año 1995 el Gobierno de la Provincia de Santa Fe, aprueba el Reglamento Orgánico de la Dirección General de Drogas Peligrosas, Decreto 1372, de fecha 23 junio de 1995.- El Reglamento compuesto de 52 artículos, determina las funciones que deben realizar las distintas Divisiones y Secciones dependientes de esta Repartición. Es decir que la finalidad del presente es determinar los principios, objetivos y procedimientos que deberán ser tenidos en cuenta por el personal de la Dirección, en lo que se relacione con sus funciones específicas, tendiente todo ello a una mayor efectividad en cuanto a reprimir el narcotráfico y prevenir la drogadicción.


El Gobierno Nacional demuestra su interés en el tema con la creación de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico dependiente del Presidente de la Nación, la cual coordina a través de sus dos Subsecretarías actividades en todo el ámbito del país, tanto en la faz represiva como preventiva, depositando en las policías provinciales una responsabilidad muy grande para lo cual ha dividido el país en regiones, integrando Santa Fe, la denominada " Noreste Argentino N.E.A.
También en razón de que el delito no respeta frontera se mantiene una fuída relación con la D.E.A., Agencia de los Estados Unidos de Norteamérica contra las Drogas, quien ha provisto a esta dependencia de equipos de comunicación y ha dictado los cursos denominados Básico y Superior para capacitar a nuestros funcionarios y también otorgó una beca para perfeccionar a un guía de canes detectores de drogas, entregando como reconocimiento un ejemplar para nuestra fuerza.
En síntesis la Policía de la Provincia de Santa Fe, a través de la Dirección General de Drogas Peligrosas, cumple funciones específicas en la ardua lucha contra el uso indebido de drogas, brindándose en pos de la comunidad a la que se debe.

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